Jero nació en Salamanca, pero a los 18 años, unas vacaciones en Londres se convirtieron en una estancia de 20 años. Desde muy joven inmerso en las subculturas urbanas como el punk y el hardcore, descubrió el mundo del tatuaje, que más tarde se convertiría en su pasión y profesión.

Sus raíces en el tatuaje tradicional, con el enfoque “bold will hold”, se reflejan en líneas firmes, pigmentación sólida y simplicidad, características que garantizan belleza y durabilidad. Entre sus influencias clásicas se encuentran grandes nombres como Bert Grimm, Tim Hendricks, Scott Sylvia, Guy Le, Leo Zulueta y Paul Dobleman, entre muchos otros.

Trabajó en varias tiendas de tatuajes con alto tráfico de walk-ins, lo que le permitió adaptarse y dominar una amplia variedad de estilos. Disfruta tanto de las técnicas tradicionales como más contemporáneas, desde colores sólidos y brillantes hasta dotwork.

En noviembre de 2024, Jero se estableció en Bilbao y empezó a trabajar con su nueva familia de Tattoo adicts, tras traspasar su estudio en Londres, Seed of Life Tattoo, la cual sigue visitando de vez en cuando como artista invitado.

En los últimos años, ha centrado gran parte de su trabajo en heavy blackwork y neotribal con toques geométricos (sacred geometry). Aunque estos estilos ocupan la mayor parte de su tiempo, sigue abordando otros proyectos y estilos, aprendiendo y perfeccionándose constantemente.

Siempre está abierto a colaborar con otros artistas y realizar guest spots en diferentes estudios, lo que le permite conocer nuevas personas, lugares y técnicas.

Además de tatuar, Jero también siente una gran fascinación por las herramientas del oficio. Tras estudiar varios años con Seth Ciferri durante y después de la pandemia, dedica parte de su tiempo libre a recondicionar máquinas de bobina antiguas, ajustarlas y personalizarlas para optimizar su rendimiento según cada trabajo específico.